
Todos me hablaron del amor y con él me tropecé pero el amor se apagó y abandonado quedé, yo no quiero hablar de amor ni que me hablen de él, tengo roto el corazón por culpa de esa mujer.
Me hablaron del amor y como un ciego fui a buscarlo, pero ese amor me abandonó y yo no sé como superarlo.
Si la vida es como una aventura no hay mayor fortuna que vivirla bien, por eso mi niña no ves lo que tengo sino lo que hago.
Voy a dejar crecer mi barba y mi alegría, porque no importa cuanto se viva sino la manera.
Para saber que la vida se ha vivido hay que equivocarse de horizonte y de camino, andar perdido y caer.
La esperanza de mantener la relación se convirtió en mi odisea, rebenté mi puño luchando por lo que creía, más sólo ya veo mis heridas y mi sangre derramada.
Cuando el amor sale del alma se te clava enseguida y si un día por fin desaparece, cuando menos te lo esperes resucita y te mata otra vez, porque nadie puede darse a dos amores en una sola vida.
Con ella cada noche era tremenda la ternura y divino el dolor y más seguro y menos peligroso hacer la guerra que el amor.
Mi amor salió del alma como la más terrible aventura y aunque sé que ese amor no se cura, su herida siempre me acompañará, por eso ahora vivo al calor de los rayos que me da la Luna.
De nuevo vuelves a mí, amada y temida Soledad...
1 comentario:
Me gusta. Triste pero intenso, te ha quedado precioso ^^.
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